martes, 30 de octubre de 2007

De puente a puente

Desde que han cambiado la hora me siento más primaria. Acostumbrada al ritual de despertarme y desayunar, almorzar y siesta, cena y cama, agradezco la anarquía de tener hambre demasiado tarde y sueño demasiado pronto. Me gusta dejarme llevar por los cambios de luz y de tiempo, pasar frío y calor en la misma media hora. La naturaleza destruye los hábitos que pretenden organizarnos la vida. Siempre ha sido así, mucho antes que Al Gore y el primo de Rajoy polemizaran sobre el impacto de nuestro paso por el planeta.

El otoño también es enimentemente poético. Creo que desde que a alguien le dio por decir que una hoja que cae de un árbol es una alegoría del ciclo de la vida. Yo siempre pensaba que era más bien un cambio de estación, y por lo tanto climático, pero con los años he descubierto que soy más feliz sintiéndome primaria que aspirante a premio Nobel.

El otro día fui a Moguer a la entrega del Perejil de Plata y algunos de los poemas de Juan Ramón Jiménez que leyó el premiado me reconciliaron con la poesía. Con la libertad de escribir aquí lo que me va dando la gana, os copio uno:

¡Intelijencia, dame

el nombre exacto de las cosas!
... Que mi palabra sea

la cosa misma
creada por mi alma nuevamente.
Que por mí vayan todos
los que no las conocen, a las cosas;
que por mí vayan todos
los que ya las olvidan, a las cosas...¡
Intelijencia, dame
el nombre exacto, y tuyo
y suyo, y mío, de las cosas!

Tres citas para hoy a las 21.00. La Universidad, que me manda sms informándome de su agenda cultural, me recuerda que se inaugura la temporada de Cantero Rock con The Sea and Cake, "Rock elegante desde Chicago. No te lo pierdas. Precio: 3 E estudiantes y 6 General". Para los profanos como yo Vicente Ponce explica en el periódico que están "ubicados entre lo más pop de Belle and Sebastian y lo más experimental de Stereolab" y que recalan en Huelva "con el que quizás no sea su mejor disco, pero sí el más plácido, dream pop con toques de jazz y unos músicos que más que tocar, acarician los instrumentos".

El Cineclub continúa la senda extraña que se ha marcado útlimamente y hoy nos sorprende con una extensión del Festival internacional lésbico y gay 'Al-Andalesgai-07'. La peli, Electroshock, es española y ha cosechado algunos premios. Por si alguien quiere saber de qué va: "Isabel ama a una persona desde hace 30 años, pero cuenta cómo la familia de su amante impidió la relación de una forma brutal. Estaba enamorada de otra mujer, Mari Carmen, y sufrió incluso electroshocks y todo tipo de vejaciones por ser lesbiana. Después de diez años, la mujer salió del hospital, con su cerebro destrozado por la corriente eléctrica".

También esta noche, a las 21.00 horas en el Palacio de Congresos, concierto de la Orquesta de Córdoba, dentro del encuentro de las Artes y las Letras de Iberoamérica, que interpretará "Fuga criolla, concierto para marimba y orquesta, estancia y redes". Me ha encantado el título.

Fin de semana. Imprescindible: La Cubana, con Cómeme el coco negro, dentro de la gira de su 25 aniversario. Actúan desde el jueves al domingo, espero que queden entradas para alguno de los días . Y el sábado, en Valverde, termina el Festival de humor con Gorda, con Teté Delgado y Luis Merlo.

El Super8, increíblemente redecorado y con nuevos bríos, da mañana por la noche una fiesta de Tosantos, que es más de aquí que decir Halloween. El alma en pena de Migue ha mandado una bonita invitación anunciando que habrá sorpresas y cerveza gratis para quien vaya disfrazado. Lo recomiendo, os sentiréis muy cómodos entre tanto fantasma. Os lo digo yo, que ahora entiendo todas las veces que no me han dicho nada por largarme sin pagar.

Termino. El mejor recuerdo para los que no están es procurar ser felices como si estuvieran.

Que disfrutéis de puente a puente y tiro porque me lleva la corriente

martes, 23 de octubre de 2007

Incógnitas

El otoño se anuncia lento y cargado de incógnitas, atapías, nerviosismo, planes pendientes, veleidades, zapatos nuevos, cine, visitas a Ikea, presupuestos, embarazos, hipocondrías y cambios climáticos. Cada uno sabréis a qué me refiero, si os identificáis con algo del cargamento. En mi caso, la sensación de inminencia que merodeaba mi vida este verano se ha transformado en otra cosa. En una especie de inminencia mutante.

Es como si algo -o todo- estuviera a punto de producirse y al final a) o no sucede ó b) sucede una cosa distinta. Lo que no sé muy bien es qué esperaba que ocurra. Es lo malo de mezclar pasado y futuro. Dedicaré lo que queda de octubre o de correo a averiguarlo y mientras tanto, seguiré esperando.


Tras la traumática experiencia del martes pasado, me cuestiono seriamente ir hoy al cineclub. Ponen Las películas de mi padre, de Augusto Torres. Sinopsis: El padre ha muerto, la hija no recuerda nada aunque, a medida que ve las películas que hizo su padre antes de que ella naciera con diferentes niñas, jovencitas, una sospecha comienza a crecer en su cabeza. ¿Hubo algo entre su desconocido padre y ella?. La crítica (la única) que he encontrado en Internet es nefasta. Me encanta la rotundidad de ese adjetivo. Si alguien se entera de quién ha programado el cineclub este trimeste que me lo diga, por favor. Para mí esa es otra de las grandes incógnitas del otoño.

Mejor opción para esta noche es el teatro. La secreta obscenidad de cada día, de la compañía de Teatro Itinerante de Venezuela, en el Teatro del Mar de Punta Umbría y dentro del IX Encuentro de las Artes y las Letras. En el periódico dicen que Marx y Freud aparecen como dos personajes decepcionados porque sus propuestas han sido utilizadas en la guerra ideológica que divide a la humanidad. Los pobres. Yo, desde que tengo que convivir con la realidad nacional, abandoné el comunismo y el psicoanálisis.

El otro día presentaron la programación cultural de la Universidad, que tiene bastante mejor pinta que las películas del cineclub. Iré dando cuenta de ella, adelanto charla de Quino y buenas actuaciones en Cantero Rock.

Exposiciones. La visita al Salón de Otoño nunca me ha decepcionado. Está bien la obra ganadora de este año, con el trasunto de la inmigración. Las 33 finalistas estarán en la Casa Colón hasta el día 9. En el Museo, otra muestra interesante, Jugar a ser, de juguetes antiguos. Quiero ir para recordar que cuando era niña no necesitaba ir a exposiciones para no aburrirme.

El sábado, vuelve el teatro a la capital con Pareja Abierta, de Darío Fo, con Sergio Pazos, el que era reportero de Caiga quien Caiga. Por cierto, si lo véis, estad pendientes, que puede que la crisis vecinal de Tartessos tenga eco en el programa. Creo que lo han vuelto a cambiar de día, las apuestas seguras para hoy siguen siendo House y los Ratones Coloraos.

Termino. El Patronato de Turismo ha convocado un concurso de fotografía sobre Huelva, La Luz. Pueden participar tanto profesionales como aficionados y el plazo está abierto hasta finales de noviembre. Las fotos premiadas se las llevarán a Fitur para promocionar la provincia. Si os lo cuento es porque no tengo ninguna esperanza de ganar. Con suerte, me llevarán a Fitur a mí también. Me comprometo a promocionar algo.

Donde sí ganaría seguro es en un concurso de Fotos de Sobrinos. Mientras buscaba algo de luz entre mis archivos, su sonrisa lo iluminaba todo. Así que se me despejan incógnitas: lo inminente es poner una foto suya en el blog e irme a Madrid a verlo cuanto antes.


Que el cambio de hora os produzca una feliz somnolencia.

martes, 16 de octubre de 2007

La reversibilidad del tiempo

Pasó el puente entre dos aguas, a mitad de camino, entre el trabajo y el ocio, entre el verano y el otoño, entre Huelva y Valverde, entre la diversión y el aburrimiento... Volví a corroborar que la vida es cíclica y el calendario repetitivo. El pobre, está sometido desde el año anterior, y tiene la misión de programarnos el tiempo para que nos demos cuenta de que pasa o quizás no.

Como sabéis, mantengo la teoría de que cada año deberían incorporarse fiestas nuevas, o cambiarlas de nombre. En vez de Día de la Hispanidad o del Pilar, este 12 de octubre podría haberse llamado Festividad del carril bici, Puente para ir a ver a las madres, Éxodo internacional para comprar toallas, Escapada de plena ocupación en la Sierra...

Yo tengo un calendario hecho con un marco del Ikea con argollas y una página para cada mes del año. En cada mes tengo una foto de mi sobrino, correspondiente al mismo mes del año anterior. En la que está puesta ahora lleva unos tirantes y da sus primeros paseos por el suelo empedrado de El Buitrón. Así lo veo crecer cada día, aunque sea un año después. Entonces el tiempo adquiere significado.

Para mí éste ha sido el Puente de la Distancia mal llevada. Mi sobrino estaba en un hospital de Madrid y me hubiera gustado estar allí para contarle un cuento de médicos que eran magos y medicinas que eran chucherías.

El sábado quedé con mi pandilla valverdeña. Cenamos como adultos y bebimos como adolescentes. En el bar, observé a mis amigas buscando alguna referencia. Siempre me gusta reconocerme en ellas. Ahora reconozco sus anillos de casadas. La escena también tenía algo de cíclica, planificando los mismos viajes y fiestas de todos los años. Como nunca vamos, seguimos planeándolos. Fue un feliz reencuentro.

La segunda mitad del correo viene cargada de convocatorias.
Hoy empieza el Salón del Libro en la Caja Rural, con el que se pretende promocionar los autores, obras y editoriales onubenses. Más o menos lo que se venía haciendo hasta ahora en el 1900. Siempre he pensado que Huelva es una provincia pródiga en escritores omnipresentes y de cuestionable calidad literaria. Yo iré mañana a un desayuno informativo para conocer las nuevas publicaciones de la Diputación. La expresión tiene su lógica, al fin y al cabo nos desayunamos noticias cada mañana.

Desde hoy hasta el jueves, Semana de la cultura japonesa, con talleres de juegos y escritura tradicionales. La parte friqui del programa es cuando los participantes acuden disfrazados de personajes del anime y manga.

La exposición de esta semana: Galería de sueños, de Faustino Rodríguez, en el Museo. Colección de 48 obras creadas durante los últimos 7 años de su vida.

Del jueves al domingo, la mejor de todas las ofertas: la Feria del Jamón de Aracena. El viernes hacen desde allí el Ser viajeros -seguro que se ponen púos- y Gala presentada por el de Los Morancos que acaba de casarse. El sábado por la noche, degustación de productos de la matanza y el domingo, sorteo de "su peso en jamón". Ojalá me tocara. Mi querida Margarita, con la inteligencia de quien sabe reírse de una misma, diría ahora algo que sonara a chiste de gordas. No hay concurso que regale el peso en oro de lo que ella vale.

En la tele para hoy, domina la política nacional. En la Primera vuelve el Tengo una pregunta para usted, esta vez sin el interés del duelo Zapatero-Rajoy y los precios del café. Lorenzo Milá modera un interrogatorio tripartito a Llamazares, Duran i Lleida y Carod Rovira. Seguro que éste último se gana el titular de mañana. Y en Tele5, vuelve la Campos, un programa que conmemora los 25 años de la llegada de Felipe González a la presidencia del Gobierno, centrándose en los primeros ocho años de su vida política. El programa lleva un nombre poco acertado: El laberinto de la memoria. Es curioso que casi siempre nos interese más el pasado que el futuro.

Termino. A Millás le han dado el Planeta y a Cuadri el premio del Festival de Cine Latino de Los Ángeles. Me alegro mucho por los dos. Y por Boris Izaguirre. Viene a demostrar que la frivolidad es un rasgo habitual de los intelectuales.

Hay personas más cercanas que también copan la actualidad informativa de hoy. No todos los días las cualidades de un amigo aparecen en el periódico. Así que esta noche invite a la cerveza José Miguel y todos brindaremos por su perfil.

P.D. Os adjunto vista casi pintada del sol poniente desde mi ventana antes de que se convierta en bloque de pisos.
Que os dejéis llevar felizmente de este tiempo pausado e imprevisible.

martes, 9 de octubre de 2007

La imposibilidad del vacío

Hay distintos tipos de vacío. Físico, como cuando uno llega a un sitio y a veces está lleno -como la Feria de la tapa- y otras veces vacío, como un estadio de fútbol sin afición. También hay vacíos existenciales y anímicos, como la mayoría de mis domingos. Otros son paradójicos, como tener la nevera llena y el estómago vacío, la cartera llena y el cerebro vacío o el correo lleno y vacío de contenido...

El que a mí me atañe últimamente es un vacío psicosomático. Lo tengo desde que me sacaron una muela la semana pasada. Gracias a los antibióticos no he tenido complicaciones, pero la sensación de ausencia permanece. Creo que es el síndrome del miembro fantasma. La percepción de que un miembro amputado todavía está conectado al cuerpo y sigue funcionando. En Wikipedia dice que entre el 50 y 80% de las personas amputadas experimentan estas sensaciones y que se produce porque el cerebro continúa recibiendo mensajes de los nervios que originalmente llevaban los impulsos desde el miembro perdido. No sabía yo que mi muela emitiera tantos mensajes. Igual se estimuló al llegar a la Feria de la Tapa.

Lo que que más me conmovió fue cuando el dentista, después de sacármela, me la enseñó. La muela, no su miembro fantasma. Acostumbrada a verla sólo por fuera, parecía un iceberg. La muela. Me parecía increíble que esa pieza con geometría propia hubiera vivido en mi boca treinta años, desde que mis dientes de leche dejaran arruinado al ratoncito Pérez. Me encantaba que el ratón tuviera un apellido tan español.

Me emocioné al ver que durante todos estos años, la muela había echado dos grandes raíces en mi encía y entendí que mi dolor no era nada comparado con el que sienten los que abandonan su patria y su familia. La boca se me humedeció, noté cómo la lengua y la campanilla lloraban al despedirla.

Desde entonces, siento un profundo hueco en mi vida bucodental.
Ahora bien, prefiero eso a llenar de hormigón armado el vacío. Lo digo por la obra que da a la parte trasera de mi casa, la que se ve desde mi ventana. Los pisos han alcanzado ya la altura del mío, y los albañiles siguen trabajando, lo cual significa que ya no puedo andar en pelotas ni en mi propio salón. Esta mañana, mientras me tomaba un café en la cocina -vestida-, uno de los peones me contaba desde la otra parte del patio que aún les faltaba levantar dos plantas más. O sea, que me tapan la luz, ponen a vivir gente a la altura de mis ventanas y me quitan la bonita vista urbana de la parabólica de enfrente.

De pronto entendí que todo es filosofía y asimilé aquello de la imposibilidad del vacío, que creo que dijo Aristóteles. Luego lo miraré en Wikipedia.

En cuanto a recomendaciones, seré breve. El cineclub pone hoy La línea recta, de José Mª de Obre, "una historia urbana en la que la protagonista se comporta como la propia ciudad en la que habita, crece y avanza en una línea recta imaginaria que le lleva de un trabajo a otro, de una vivienda a otra, sin rumbo fijo, sin detenerse, sin descansar, sin saber a dónde va".

Esta semana, el encuentro de las Artes y las Letras de Iberoamérica gira en torno al teatro. En la Unia celebran el III Foro Iberoamericano de Dramaturgia. Y en Gibraleón, el miércoles y jueves la obra A la Luz de Góngora, con Juan Luis Galiardo y Kiti Mánver, y la exposición El escenario de la ilusión barroca, ambas del Centro Andaluz de Teatro, y las dos en el Convento del Vado.

Mañana, un concierto de música barroca en la Catedral que ha organizado la Diputación con motivo de la Hispanidad. Me han dicho que es muy bueno.

Los que estéis cerca de Zalamea, podéis acercaros a las Jornadas de Música Latinoamericana que organiza Música Fundamental, con exposición de carteles, películas y un concierto de son el sábado. Lo mejor: Buena Vista Social Club, el jueves a las 21.00 en el Teatro Ruiz Tatay.

El viernes es fiesta y el día de mi querida amiga Pilar. Los que tengáis niños y los que no podéis ir al Muelle de las Carabelas, que tiene jornada de puertas abiertas. Por la noche, en Valverde, festival de Teatro de Humor con Buuu!!!, de Yliana. Si vais, pasaros por la heladería de Los Valencianos, en la plaza del pueblo. Cierra la temporada todos los 12 de octubre y siempre da dos por uno.

Es todo por hoy. Que disfrutéis de esta generosa semana que os regala un día para cada uno de vosotros PD. También hay personas que llenan los grandes vacíos. Hoy se cumplen 40 años de la muerte del Ché Guevara. Mi amiga Mariví, que sigue creyendo en la revolución, me mandó este enlace que os reenvío

http://www.youtube.com/watch?v=ekceMg0bCL8

Llevo toda la mañana tarareando la canción. Después, revisé mis fotos de Cuba para elegir una para el blog y me alegré que en El Buitrón se rodara Guerrilla. Pensé en lo universal, en que los mitos viven porque representan un modelo y en que las ideas no mueren si hay alguien que las piensa.

martes, 2 de octubre de 2007

Despedidas y bienvenidas

Desde luego, no vuelvo a llevarme una semana ausente de todo. Cuando he intentando volver a conectar con la realidad, casi no la reconozco. Apenas consigo recuperar mi sitio en ella. El domingo no recordaba cuándo tenía que volver de vacaciones, así que lo he hecho hoy.

Los martes me caen mejor que los lunes. Además así ha pasado más tiempo desde el sábado y de la resaca que deja despedir septiembre, a una amiga que se muda de ciudad, y a mi idea de que a lo mejor ya nunca volvía a trabajar. Sentí que lo único que no había cambiado es pensar que la existencia, mirándola así, es dolorosa. Supongo que por eso me emborraché tanto y fui amnésicamente feliz.

Cuando superé la resaca, pensé que en el fondo las despedidas son también una forma de bienvenida. Y celebré que mi hermana y una amiga -mía, no de mi hermana- me vayan a hacer titas de nuevo, que haya un nuevo periódico que regala pelis buenas por diez duros, la inauguración de la temporada en el Gran Teatro y en el Super8, que las tardes de lluvia me devuelvan olores de mi infancia y que en octubre haya un puente y una feria de la tapa. Ni siquiera encontrarme el recibo de la contribución en el buzón consiguió amargarme el día. Despedí a un año menos de hipoteca y recibí a uno más de propiedad de un Bien Inmueble.

La vuelta a la Diputación ha sido como regresar al colegio después del verano. Por el camino, me entretuve en los charcos y, al llegar, me apetecía contar historias del verano y comerme un bocadillo en el recreo.

Además, estoy contenta porque hoy viene al Salón de Plenos Juanjo Millás. Doblemente contenta. Primero, porque creo que debe ser un tipo simpático, como sus columnas. Y segundo, porque venga precisamente hoy: en un día de la semana que me cae bien y para dar la bienvenida al nosecuantos Encuentro de las Artes y las Letras de Iberoamérica y a mi vuelta a la rutina. En una especie de círculo, ayer termine un librito suyo Tonto, muerto, bastardo e invisible, que me llevé de viaje y que me ha acompañado en mi ausencia. Es muy recomendable, el libro, y pensar que a veces todo tiene algún sentido disfrazado de coincidencias.

Después, a lo mejor sigo los deberes culturales y voy al Cineclub. Se estrena con Yo, de un tal Rafa Cortés, que el Festival de Cannes distinguió como película revelación del año pasado según el jurado de la Federación de la Crítica Cinematográfica Internacional. En Internet dice que es la historia de un hombre que, sintiéndose acusado por algo que no ha hecho, trata de demostrar su inocencia. Todos los intentos para resolver dicha situación le llevaran a enfrentarse con el verdadero problema: él mismo.

El viernes, concierto de toda la vida, la de María Dolores Pradera, no sé si con gemelos o sin ellos, y el sábado La ópera de Verdi, dentro de los conciertos líricos conducido por Fernando Argenta, el de los Clásicos Populares y el Conciertazo.

Me cuentan que el sábado, a partir de las 00.00, en el Budha, un concierto de Nicolás Capelo, un tipo que versiona a gente como Sabina. Se le escucha y se toman una copitas. Recomendado queda.

En el capítulo de exposiciones, el lunes se inaugura una de pintura en la Sala Plus Ultra de Cajasol, de Vicente Ruiz, un artista madrileño afincado en Compostela. Me han mandado la invitación y tiene buena pinta, con cuadros tipo collage de colores vivos.

En la tele, las series nuevas de los martes siguen con más o menos éxito (Hermanos y Detectives en Tele5 y Cuestión de sexo en Cuatro). Mejor, El intermedio, de Wyoming, a las 21.25 en La Sexta, y Caiga quien Caiga, que lo han cambiado a hoy .

Y en el quiosco, el National Geographic regala el reportaje de Al Gore sobre las verdades incómodas del cambio climático.

Por esta semana, es todo. Espero haber atendido vuestras peticiones. Es un halago que me consideréis portavoz de vuestros deseos.

Que la lluvia os deje la ternura de los primeros jerseis de lana.

A ver si nos vemos. Me ha sentado bien la ausencia, pero os he echado de menos.