martes, 22 de julio de 2008

Días felices


Sin querer parecer interesada, os diré que celebrar mi cumpleaños me ha dejado muchas cosas buenas, sobre todo regalos personalizados. Me he dado cuenta de que mis amigos conocen bien mis gustos, por eso me han regalado maravillosas antologías de Mafalda, Maitena, Forges y El Roto. Para las fotos, un álbum y un marco multicolor, y para el verano, tres collares, un bolso para la playa y otros dos para la ciudad. Mi madre y mi hermano me han regalado un par de chanclas -uno cada uno- de diferentes estilos, para que siga recorriendo incansablemente los caminos de la vida.


Nadie recogió la sugerencia de la bola del mundo, pero mi sobrino me hizo un regalo dibujado y hemos viajado con la imaginación durante todo el fin de semana. Ha habido ideas muy originales, como un cartel de Fellini o un vale para un tratamiento en un spa. Alguien me regaló algo que no se puede comprar con dinero: la ilusión de recibir por primera vez un ramo de flores y comprobar que Interflora existe. El premio se lo llevó un sobre a mi nombre: lo abrí y era una invitación de boda para el 8 de agosto. Si voy, tendré que hacer un regalo, con lo cual se cierra el círculo mágico hasta el año que viene.


Migue y Paco me regalaron la cerveza. En el Super8 hubo ganchitos y filipinos y mi administrador administró chapas ochenteras que ponían Yo soy del cumple de Bgo a los invitados y a todos los que iban apareciendo. El sábado compré una tarta en el Mercadona y el domingo soplé las velas con mi sobrino. Creo que en el fondo quería alargar un poco más mi cumpleaños y tantos días de felicidad.


Esta semana me siento un poco huérfana de eventos. Así que como soy de las que no ha ido al Summercase ni a Benicassim ni a ver a Springsteen, yo también me he buscado un festival de verano, por aquí cerca, en Ayamonte. El FEPO'08. Me voy con mis amigas las de las despedidas de soltera y aunque este año no se casa ninguna, estoy planteándome si llevar a Agustín y a Wilson -los muñecos hinchables, para los que tenéis poca antigüedad en el blog- para usarlos de colchoneta en la playa de Punta del Moral.

El Festival tiene dos cosas buenas: un programa variado -con grupos españoles, portugueses y argentinos- y que es gratis. Los más conocidos son Muchachito Bombo Infierno y TriSexual Band, que me dijo Edu que actuaron en las cruces de Berrocal y que eran muy divertidos. Lo tenéis todo en
www.festivaldelponiente.com.


Mañana, dentro de las actividades culturales de los cursos de verano de la Unia, que tanto trabajo dan a la pobre Mariví, la compañía de títeres El espejo negro lleva a Moguer La vida de un piojo llamado Matías. En el Convento de San Francisco a las 22.30. Anuncio intención de ir, por si alguien se apunta.

El viernes, en el Foro actúa Arcángel y el sábado en Niebla, Áyax, de Sófocles, dirigida por Theodoros Terzopoulos, que cualquiera dice que no es griego, y que se estrenó en Beijing con motivo de los Juegos Olímpicos.

Además de círculos mágicos, algunos son cíclicos: la semana que viene empiezan las Colombinas, con Chambao y Bustamante como grandes estrellas, y los espectáculos Huelva y su folclore y Se llama copla como todo lo contrario.

Y así, sin darnos cuenta, nos encajaremos en Agosto, con vacaciones para muchos y ningunas ganas de trabajar para el resto. Propongo recoger sugerencias para llenar de alternativas el mes más pegajosamente español del calendario.

Que disfrutéis leyendo las revistas de verano que llenan los periódicos entre chapuzón y chapuzón.

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